La exclusiva experiencia inmersiva a 500 metros bajo tierra lleva al turista a adentrarse en una mina real y conocer el oficio de minero

El conjunto del complejo minero, declarado BIC con categoría de Monumento, suma casi 47.000 visitas desde su apertura en 2015

El visitante 15.000 ha descendido hoy a las entrañas del Pozo Sotón (San Martín del Rey Aurelio), catedral minera que alberga un proyecto turístico único, la bajada al interior de una mina. El recorrido permite a los turistas familiarizarse con las labores propias de la profesión, picando carbón, barrenando y transitando por la intrincada red de galerías. En su viaje al interior de la tierra, los acompañan auténticos mineros de Grupo HUNOSA, profesionales que ejercen de guías pero también se encargan del mantenimiento de la explotación.

El descenso al Pozo Sotón es una exclusiva experiencia inmersiva. Las particularidades del entorno y la garantía de seguridad obligan a reducir el tamaño de los grupos por lo que cada día solo pueden acceder unos pocos visitantes. Por ello, es especialmente significativo alcanzar el hito de los 15.000 usuarios. Equipados con funda, guantes, autorrescatador –equipo de respiración autónoma para casos de emergencia– y lámpara de seguridad, se adentran a más de medio kilómetro de profundidad.

Declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de Monumento, el pozo cuenta con más 140 kilómetros de galerías. El visitante recorre parte de ellas, a pie y también a bordo del tren que traslada a los mineros desde la caña a los frentes de trabajo. Pueden optar por una visita larga, de entre cuatro y cinco horas de duración, o la corta, de dos horas y media.

Junto a las visitas interiores, la instalación completa su oferta con recorridos exteriores y con un museo minero (el CEMM) que ofrece itinerarios para niños, actividades para colegios y escolares, visitas teatralizadas… El CEMM (Centro de Experiencias y Memoria de la Minería) está gestionado por FUSBA (Fundación Laboral Santa Bárbara, impulsada por HUNOSA y cuya plantilla está compuesta por trabajadores con algún tipo de discapacidad). Desde su inauguración como complejo turístico, la variada oferta turística del Pozo Sotón ha recibido a un total de 46.923 visitantes.

La extracción de mineral en la explotación cesó en el año 2014. Grupo HUNOSA decidió desarrollar una experiencia pionera, readaptando las instalaciones para su uso turístico. Actuó, con la ayuda de su filial Sadim, especializada en la recuperación para uso cultural de espacios industriales degradados, sobre el entorno, formó a parte de personal minero como guías y trabajó en la recuperación y conservación de bienes de interés patrimonial. En el verano de 2015 comenzaron las visitas. Con ellas, se consolidaba la apuesta por la conservación y puesta en valor del patrimonio industrial asturiano (el conjunto de edificios de casa de máquinas y castilletes, declarado BIC con la categoría de monumento).

El proyecto ofrece una respuesta resiliente a la situación coyuntural de cese de la producción minera, permitiendo preservar empleo y valores culturales y sociales y contribuyendo a la reactivación económica mediante la diversificación de actividades generadoras de riqueza y el mantenimiento del empleo en un territorio especialmente castigado por la reconversión industrial. El proyecto turístico ha evolucionado desde entonces, pero la esencia sigue siendo la misma, salvaguardar la cultura y la memoria minera.