El Pozo San José recibe el Encuentro Patrimonio Minero Común
Hunosa culmina las obras de mejora de la instalación turolense con la adecuación del pavimento y jardines y la instalación de aseos
El Espacio Cultural Pozo San José, en Turón, ha recibido a más de medio centenar de participantes en el Encuentro Patrimonio Minero Común que reúne a los profesionales que gestionan los principales museos mineros del país. La jornada ha sido organizado este año por el Ayuntamiento de Mieres con la colaboración de Hunosa y la Asociación Cultural y Minera Santa Bárbara.
En su novena edición, la reunión ha rendido un tributo al fallecido alcalde Aníbal Vázquez, inolvidable figura de la cuenca del Caudal, incorporando su nombre al evento. A su llegada, los expertos procedentes de Castilla León, País Vasco o incluso Andalucía, entre otras comunidades, fueron recibidos en el basculador de la instalación minera para emprender después un recorrido por los principales activos de patrimonio industrial del valle, desde el Pozo Santa Bárbara a una ruta por las monumentales locomotoras de vapor.
El Pozo San José ha sido sede, asimismo, de la celebración de la asamblea anual de los gestores del patrimonio minero. El encuentro ha servido para estrechar vínculos, establecer sinergias y poner retos y oportunidades en común entre los distintos equipamientos.
Este evento coincide con las obras de mejora del Pozo San José, con la adecuación del pavimento y jardines y la instalación de aseos. La sala de maquinas del Pozo San José fue remozada a finales del año pasado para adquirir usos turísticos y culturales e integrarse en la Red de Recursos Culturales de Hunosa de la que también forman parte los pozos Sotón y Fondón, sede del Archivo Histórico de la compañía.
A pesar del desarrollo de las energías renovables y el abandono de la extracción de carbón, Hunosa continua comprometida con preservar y poner en valor la memoria de su actividad primigenia. La sociedad estatal conserva y promociona el patrimonio minero por su valor intrínseco, por respeto y orgullo hacia sus propias raíces y por su capacidad para convertirse en activo diferencial para impulso turístico de las comarcas mineras.



