Las mujeres del carbón, una mirada intergeneracional a su incorporación a la mina
HUNOSA reúne en el Pozo Sotón, con motivo del 8-M, a trabajadoras de distintas épocas, cuya experiencia vital y laboral refleja la evolución del sector
Grupo HUNOSA reunió en el Pozo Sotón, en el marco de los actos del 8-M, a varias de las mujeres del carbón, trabajadoras de la empresa en distintas épocas en la mina que, con su testimonio, aportaron una mirada intergeneracional al papel femenino en el sector.
En el acto, moderado por la periodista María Blanco, intervinieron María Luisa Rivero, una de las cuatro mujeres que se incorporaron en 1987 a la compañía como peones de exterior, Silviana González, minera en el Pozo Nicolasa hasta su retiro y Aroa García Lobo, quien trabajó en el Pozo Carrio y continua en activo en las oficinas centrales.
Además, se proyectó una entrevista inédita a la carbonera ya fallecida Pilar Laviana, quien ya de anciana relataba su día a día en un relato franco, lleno de naturalidad y que deja constancia de las dificultades y sacrificios que asumió una generación de mujeres prácticamente ya extinta.
La experiencia de las ponentes refleja la evolución del sector y la paulatina normalización de la entrada de la mujer en la mina. Cuando Rivero accedió a la compañía, lo hizo escoltada durante dos semanas por la Guardia Civil para blindarlas frente a las movilizaciones de colectivos de desempleados e incluso sindicatos, que esgrimían las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo y la Carta Social Europea para vetar el acceso de las mujeres.
Sus vivencias, y el rechazo social que provocó su incorporación – trabajó en el lavadero de Sovilla-, contrasta con lo vivido por Aroa García Lobo, quien se comenzó en la compañía dos décadas después y fue recibida con los brazos abiertos por compañeros: “Solo tengo buenas palabras”, contaría.
La distancia entre ambos testimonios refleja la evolución del sector, construida sobre los pilares del esfuerzo y las renuncias personales de esas mujeres pioneras que abrieron camino a costa de carácter, perseverancia y firmeza. El acto se cerró con la actuación de Anabel Santiago.